Es el título que lleva el doceavo disco de
Testament, una banda de trash metal (esto es importante) originaria de
California, y con más de treinta años de carrera. Pero no te voy a contar
información bibliográfica de la banda, porque eso la puedes encontrar hasta en Wikipedia.
Lo interesante aquí es hablar sobre su nuevo álbum Titans of Creation, porque tiene una
gran calidad. Hay veces, cuando una banda tiene tanto tiempo de trayectoria, que
para seguir siendo del agrado de sus fans tienen que innovar, o cambiar el
sonido que los caracteriza y meter sonidos electrónicos o cualquier otra cosa
novedosa que los haga sonar especiales. Por suerte este no es el caso, y aunque
en discos anteriores se pusieron un poco más heavys, para este disco regresan
con todo el power recargado.
Todo inicia con una canción bastante buena (Y no es
para menos, ya que es la encargada de abrir el telón a todo lo que viene) que
tiene por nombre Children of the next
level, la melodía de los primeros segundos
es muy intensa, y los redobles de la batería, te preparan para una
persecución imaginaria en la que sabes que si no corres, algo, te atrapara. Después
inicia la primera estrofa, y Chuck Billy te lo dice con sus propias palabras y
su voz raspada “Mejor vete de aquí porque algo te está viendo…” La melodía continua,
y sigue siendo la misma por un rato, hasta que llega al estribillo de la canción
y todo se descontrola con un solo del inframundo. Seis minutos de un sonido distorsionado,
crudo y potente, seis minutos de trash.
Le sigue WWIII,
¿Qué podemos esperar de una canción que se llama tercera guerra mundial? Todo,
cuando escuchas está canción no sabes que pasa, y tal cual como si estuvieras
en un campo de batalla, por todos lados llueven acordes de destrucción sonora,
caen bombas en forma de doble bombo, y el bajo hace que te explote el cerebro.
No hay mucho que decir salvo: ¡Pure Fucking Metal!
Todas las canciones que siguen son cien por ciento ruidos
de calidad, sube o baja la velocidad, sientes adrenalina en cada rasgueo, y ninguna
canción te decepciona. Pero mejor escúchenlas
ustedes, porque no las voy a mencionar en este momento, ya que me salto directamente
hasta el track número diez, el que a mi parecer se merece el título de la mejor
canción de todo el disco. Curse of Osiris
Aquí Billy nos cuenta una historia muy conocida dentro
de la mitología Egipcia, y tanto la melodía como el tono gutural de voz, reflejan
bastante bien la ira, el odio, y el coraje que Horus sentía mientras completaba
su venganza sobre todo Egipto. Solo como nota, transformar esas emociones en
ritmo musical, es igual a electrocutarte con la distorsión de la guitarra y
todos sus ritmos salvajes. Para este
punto del disco es inevitable sentir que una bomba explotó dentro de tus oídos.
Si parece Trash, si se escucha como Trash, si se ve
como Trash, indudablemente es Trash.
Mi recomendación es: escuchen el disco completo y
utilicen unos audífonos que aíslen el ruido exterior para que no se pierdan ningún
detalle del disco.
No comments:
Post a Comment